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12 jun 2013

Reseña: Por trece razones, de Jay Asher


Título: Por trece razones
Saga: -
Autor/a: Jay Asher
Traductor/a: María Pardo Vuelta
Fecha de publicación: Febrero de 2009
Editorial: Ámbar
Nº de páginas: 224
Precio: 14,00 €
ISBN: 9788493678449

Sinopsis:  No se puede detener el presente, ni tampoco rebobinar el pasado. El único modo de llegar a conocer el secreto… es darle al PLAY.Clay Jensen es un adolescente como cualquier otro que encuentra, al llegar un día a casa, una misteriosa caja sin remitente dirigida a su nombre. El contenido no es otro que una serie de cintas de grabación, siete en total, que parece haberle enviado Hannah, una compañera de clase que no hace ni dos semanas que se ha suicidado. A pesar del desconcierto que supone volver a oír la voz de Hannah, Clay descubrirá que son trece las razones por las cuales ha decidido quitarse la vida, trece caras de cassete y que, por ello, son trece las personas que deben escucharlas. Él es una de ellas. “Es un juego muy sencillo: primero las escuchas, luego las pasas” dice Hannah en la primera cara.

  ¿Qué razones son esas y qué tiene que ver él con ellas? A lo largo del día, Clay se irá obsesionando con las grabaciones y hasta recorrerá la ciudad con un mapa que ella misma le ha proporcionado. Pero he aquí un viaje distinto del esperado, un viaje donde el punto de llegada es precisamente el mismo que el de partida y en el que solo hacen falta unos nuevos ojos para verlo todo como por vez primera. Hannah irá desgranando poco a poco su vida en un intento de poner de manifiesto las consecuencias, grandes o pequeñas, de las cosas que hacemos y dejamos de hacer, y que cambian el mundo a veces sin darnos cuenta.

~SIN SPOILERS~
  Detrás de esa sinopsis tan diferente me esperaba un libro que consiguiera poner al límite mis emociones tratando un tema tan delicado como es el suicidio y lo que lleva a una persona a llegar al extremo de acabar con su vida. Y al principio así fue: consiguió estremecerme y me puso la carne de gallina, con lo que prometía ser una historia que con cada capítulo me partiría el corazón en pedacitos más pequeños; pero por desgracia esta sensación fue desapareciendo poco a poco según avanzaban las páginas y, con ellas, las cintas.

  La forma en la que Hannah decide transmitir sus razones (mediante unas cintas de grabación) y a quienes quiere hacerlas llegar (a las personas que son o han ocasionado cada una de las trece razones) me pareció muy original, a diferencia de las propias razones que si algunas me parecieron de lo más lógicas y crudas, otras me parecía que flojeaban, y con esto no me refiero a que no fuesen razones suficientes para que la chica se sintiese abrumada y decidiera tomar esa terrible decisión  sino que me parecían cosas a las que en mi opinión les faltaba realismo, ese realismo crudo que consiguiese trasladarme a la piel de Hannah para poder comprender cómo se sentía y porqué algunas de estas situaciones la habían afectado tanto. Creo que esto se puede deber a que el autor no se ha querido salir demasiado de los cánones establecidos en la literatura juvenil (algo que a mi parecer, este libro requería), por lo que algunas situaciones resultan muy tópicas.

  Hannah me ha parecido una chica muy dulce particular que, por desgracia, se ha visto superada por las circunstancias y ha llegado a un punto del que no sabe como salir. Cómo ya os he dicho me hubiera gustado conocer mucho más el mundo interior de esta chica que, aunque se abre en las cintas, ni mucho menos lo hace hasta el punto que a mí me hubiera gustado. Y pienso que esto también se debe a la forma de transmitir  las razones, que aunque es muy particular y tiene sus ventajas, me pareció que limitaba mucho la conexión el personaje y su forma de expresar sus sentimientos. En cambio, Clay Jensen, el chico al que en el libro le toca escuchar las razones, ha sido el personaje que ha conseguido implicarme en la historia, por su forma tan realista de reaccionar ante las revelaciones de cada cinta y, en contraposición a Hannah, por todo lo que logra transmitir, y esto se debe a que es el narrador al que acompañamos en su travesía por las grabaciones, por lo que lo sentí mucho más cercano. La forma en la que Clay aparece en las cintas no es nada especial ni sorprendente, siendo sinceros desde el principio por lo que cuenta este tenía bastante claro que iba a ser algo así.

  Por suerte, a pesar de los defectos que le he encontrado, me ha parecido un libro entretenido y duro (vale, que quizás no hasta el extremo que me habría gustado), pero tratado de una forma muy original que sin ninguna duda lo hace especial, diferente, y eso es lo que más me ha gustado. Estoy seguro que si me vuelvo a cruzar con algún libro del autor, le daré una oportunidad.
VALORACIÓN
3/5
Mientras trabajaba como empleado en una librería, Jay Asher decidió escribir esta novela después de la visita que hizo a un museo, donde se sorprendió, mientras escuchaba el audio-tour, del sonido de la voz de una mujer que describía exactamente lo que estaba viendo sin estar allí. El autor vive en la costa de California y Por trece razones es su primera novela.



¡Muchas gracias a Ámbar por el ejemplar!